Solo son sombras
En una madrugada primaveral, el pueblo entero dormía y el insomnio se hacia amigo del espíritu, refugiada entre las sobras ocultas en la penumbra voy vagando por la casa hasta el living, cuya ventana estaba entreabierta y las cortinas danzaban al compás de la brisa semejando fantasmas. Me senté en el cómodo sillón entrecerré los ojos y de pronto sentí una fría sensación cuando un escalofrío recorrió mi cuerpo, había alguien detrás de mí.
Continuará...
Continuará...